Descubre qué son y qué es bueno para las varices
¿Qué son las varices?
Las várices son venas dilatadas y retorcidas que se suelen manifestar principalmente en las extremidades inferiores a causa de la insuficiencia venosa crónica.
Esta condición se produce cuando las válvulas que regulan el flujo sanguíneo en las venas no funcionan correctamente, lo que permite que la sangre se acumule en su interior. Esto provoca una expansión de las venas, que se vuelven visibles en la superficie de la piel.
Estas venas afectan no solo la estética, sino que también pueden causar diversas molestias físicas. Las várices son típicamente de un color morado o azul oscuro y suelen aparecer en las piernas, particularmente en las pantorrillas y en la parte interna de los muslos.
Su presencia es más común en aquellas personas que pasan largas horas de pie o sentadas, así como en mujeres debido a condiciones hormonales que pueden influir en su desarrollo.
Existen diferentes tipos de problemas venosos. Aunque las várices son las más conocidas, el término también abarca otras afecciones, como las hemorroides, que son várices que se desarrollan en el recto, o los varicoceles, que afectan al escroto.
Otro tipo asociado son las telangiectasias, popularmente conocidas como ‘arañas vasculares‘, que son más pequeñas y suelen aparecer en la superficie de la piel, especialmente en las piernas.
El impacto de las várices no es únicamente físico; también puede influir en la calidad de vida de quienes las padecen. El malestar asociado, que incluye pesadez, dolor o sensación de ardor en las piernas, puede limitar las actividades diarias.
Estas molestias, si no se tratan adecuadamente, pueden llevar a complicaciones más serias, como úlceras o sangrado.
¿Por qué se producen las varices?
Las várices pueden desarrollarse por una combinación de factores. Comprender las causas y los factores de riesgo asociados es fundamental para poder tomar medidas preventivas.
La predisposición genética juega un papel significativo en la aparición de várices. Si hay antecedentes familiares de venas varicosas, la probabilidad de que un individuo las desarrolle se incrementa.
Este vínculo genético puede deberse a características heredadas que afectan la estructura y función de las venas, como debilidades en las válvulas venosas.
Edad y sexo
La edad es otro factor notable. A medida que las personas envejecen, las venas pueden perder su elasticidad natural, lo que facilita la dilatación. Las válvulas en las venas pueden debilitarse con el tiempo, lo que contribuye al desarrollo de várices.
Por otro lado, el sexo también influye en la probabilidad de sufrir esta condición. Las mujeres tienden a desarrollar más várices que los hombres, en parte debido a los cambios hormonales que se producen a lo largo de la vida.
Por ejemplo, en momentos como la menstruación o el embarazo, las hormonas pueden relajar las paredes venosas, facilitando su dilatación.
Un estilo de vida sedentario o hábitos inadecuados también representan factores de riesgo importantes. Se ha demostrado que la falta de ejercicio regular y prolongadas jornadas de estar de pie o sentado pueden aumentar la presión en las venas de las piernas.
Ejercicio físico
La práctica regular de ejercicio es crucial para mantener una buena circulación. La falta de actividad física puede contribuir a la debilidad de las venas y al estancamiento de la sangre, lo que aumenta la probabilidad de desarrollar várices. Actividades como caminar, nadar o andar en bicicleta son recomendables para mejorar el retorno venoso.
Permanecer sentado o de pie durante largos periodos
Permanecer en una misma posición, ya sea sentado o de pie, durante un tiempo prolongado puede agravar la presión venosa. Cuando las piernas no se mueven, la sangre puede tener dificultades para circular adecuadamente hacia el corazón. Es aconsejable hacer pausas y cambiar de posición con frecuencia para promover una mejor circulación.
¿Cómo prevenir las varices?
La prevención de las várices es fundamental para mantener una buena salud venosa. A continuación, se presentan diversas estrategias que pueden reducir el riesgo de desarrollarlas y mejorar la circulación sanguínea.
Control del peso
El sobrepeso y la obesidad son factores que incrementan la presión sobre las venas y pueden contribuir al desarrollo de várices.
Mantener un peso saludable, a través de una dieta equilibrada y ejercicio regular, es esencial para reducir esta presión adicional.
Además, un mejor control del peso puede favorecer la salud general y el bienestar físico.
Elevación de las piernas
Elevar las piernas es una práctica sencilla que puede resultar muy beneficiosa.
Cuando se está sentado o acostado, es recomendable elevar las piernas por encima del nivel del corazón.
Esta posición favorece el retorno venoso y ayuda a disminuir la hinchazón y la sensación de pesadez en las piernas, especialmente después de estar de pie o sentado por períodos prolongados.
Evitar ropa ajustada
La ropa muy ajustada puede restringir la circulación sanguínea adecuada, lo que puede contribuir a la aparición de várices.
Se sugiere optar por prendas de vestir más sueltas y cómodas, especialmente en áreas como la cintura, las piernas y la pelvis.
Esto permitirá un mejor flujo sanguíneo y reducirá la presión sobre las venas.
Uso de medias de compresión
Las medias de compresión son una herramienta efectiva para mejorar la circulación en las piernas.
Estas medias están diseñadas para aplicar una presión gradual en las extremidades, lo que ayuda a que la sangre fluya mejor hacia el corazón.
Se recomienda utilizarlas, especialmente para personas que están mucho tiempo de pie o sentadas, así como en situaciones donde se pueda experimentar hinchazón o fatiga en las piernas.
No obstante, en ocasiones es inevitable que este problema tan común haga acto de presencia. Por suerte, actualmente contamos con soluciones realmente eficaces en referencia a la eliminación de varices, incluso sin necesidad de realizar una cirugía.
Si estás buscando la mejor clínica para quitar varices, asegúrate de que cuente con profesionales especializados y tecnología de vanguardia para ofrecerte el tratamiento más adecuado y seguro
Recuerda no todas las varices son iguales ni se tratan de la misma manera. En esta guía te explicamos los distintos grados de varices y cómo reconocer cada uno según sus síntomas.
¿Cómo se pueden eliminar las varices?
Dependiendo de su localización se pueden tratar mediante diferentes técnicas, como la cirugía o la escleroterapia de varices.
Los lugares más comunes donde se pueden formar las venas varicosas son las extremidades inferiores. Los síntomas producidos por las varices pueden variar dependiendo del tipo y grado de afectación en que se encuentren, pero todas son tratables. Quienes las padecen ya no tienen por qué soportar todas las molestias que provocan.
Gracias a los avances en la medicina existen muchos tratamientos para varices. Antiguamente, la cirugía era la única solución para esta patología, pero, afortunadamente, métodos como la escleroterapia ecoguiada han alcanzado gran popularidad ya que es un procedimiento terapéutico que no es invasivo, es totalmente ambulatorio y su recuperación es mucho más rápida.
En cuanto al TRATAMIENTO, sería bueno que los especialistas de Angiología y Cirugía Vascular dejasen de operar varices que en el 90% de los casos han recidivas a los 5 años.
Es bueno empezar a creer que la Técnica de la Micro espuma para conseguir que las venas con reflujo sean convertidas en cicatrices, mejor que con técnicas de abrasión por calor (láser, radiofrecuencia, vapor de agua, etc.) o por pegado con metacrilato o técnicas similares (Clarivein).
Las ventajas de la Micro espuma, es que se puede llevar a las venas de menor calibre, donde no llegan las sondas láser, sonda de radiofrecuencia, sonda de vapor de agua o sondas de metacrilato o Clarivein, pues llega un momento en que impactan con el calibre de la vena y no pueden progresar más.
La ventaja de que un profesional se dedique exclusivamente al tratamiento para varices, hace que el tratamiento sea más eficaz.
¿Qué es bueno para las varices?
- Es bueno en primer lugar la PREVENCIÓN, no pasar muchas horas sentado o de pie.
- No cruzar las piernas, para que no se trombose una vena (llamada Safena Interna) que pasa por detrás de la rodilla.
- Es bueno no ganar mucho peso en los embarazos.
- Es bueno no hacer demasiada musculación en el gimnasio.
- Sería bueno que la herencia de las varices fuese inferior al 70%, pero de momento es inevitable.
¿Qué especialista trata las varices?
La respuesta a la pregunta ¿qué especialista trata las varices? puede parecer sencilla, pero en realidad es más compleja de lo que muchos piensan. Tradicionalmente, las varices han sido tratadas por Especialistas en Angiología y Cirugía Vascular.
En paralelo, las arañas vasculares —por motivos más estéticos— han sido abordadas por Médicos Estéticos. Sin embargo, la verdadera solución para las varices crónicas no siempre se encuentra en estos enfoques tradicionales.
Tanto los cirujanos vasculares como los médicos estéticos han obtenido resultados, en muchos casos, poco satisfactorios. La cirugía no representa una solución duradera para las varices de Grado II a VI, y los tratamientos meramente estéticos no abordan la raíz del problema, lo que genera frustración en los pacientes.
Fue hace unos treinta años, que un tal Dr. Cabrera trajo desde Francia la técnica de la Micro espuma, técnica que se ha ido perfeccionando con los años hasta la actualidad y son unos cuantos pioneros quienes recibieron las enseñanzas del Dr. Cabrera y a su vez las vamos transmitiendo a las generaciones futuras.
La Técnica de la Micro espuma nace durante la Segunda Guerra Mundial donde en el frente, a los soldados heridos, posteriormente hacían unas malformaciones vasculares llamadas VARICES, que también por las largas guardias de pie, empeoraban y no se podían operar por el postoperatorio tan largo.
La Técnica de Micro espuma comienzan a realizarla Médicos Generalistas que no tenían especialistas para solucionar la Insuficiencia Venosa Crónica (comúnmente llamadas VARICES).
Hoy en día, la flebología se ha consolidado como la rama médica más eficaz para el tratamiento de las varices, y es precisamente la que responde con mayor acierto a la duda sobre qué especialista trata las varices con mejores resultados.
Los médicos flebólogos están especialmente formados en Medicina Vascular, Ecografía Doppler y Escleroterapia con Microespuma, lo que les permite tratar el problema desde su origen y sin necesidad de cirugía.
El Dr. Ángel Crespo Cagiao, médico generalista con formación específica en flebología, es un claro ejemplo de esta nueva generación de especialistas. Gracias a su experiencia y preparación, es reconocido por sus pacientes y en redes sociales como uno de los mejores médicos para tratar varices de forma segura y eficaz.